Amanecio, y los rayos de luz me iban contando que me tenia que ir.
Las sonrisas y los tiernos besos, en cambio, me gritaban que me quedara.
Los minutos pasaban y mis manos temblaban.
En un minuto me puse a pensar el porque me tenia que ir, y mi alma me vomito la verdad, para buscar la felicidad.
Y aunque cada vez que piso mi casa y estoy con mi gente, me retiene mi corazon, mi alma me grita que no.
Trate de reprimir mi corazon,pero cuando veo sus ojos, me lleno de angustia de no estar cerca, de perderme cada segundo de estar cerca; pero no pude, me fui entre sollozos, no queria decir adio
Las lagrimas se esparcian por la carretera, pidiendo que algo me cerrara el paso para no seguir, para volver.
Y a cada paso, mi corazon se relajaba, y fui escuchando poquito a poco a mi alma,diciendome que siguiera que no mirara hacia atras.
La lucha aun sigue, aunque en mi reposo, cuando nos damos la tregua, me imploro misma que no sea tan dura, que siga quitando a manotazos las nubes que ocultan mi futuro.
Aunque de vez en cuando en la oscuridad de la noche mi cara se inunde de lagrimas que no emanan de los ojos sino de mi corazon.
Nunca he entendido la palabra añoranza, añoro a mi gente,a mi tierra, a mis amigos..
Gemma soñó esto a las 8:40 p. m.
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